Muchas son las personas que nacen con la tendencia a la aparición de juanetes, o lo que es lo mismo una desviación lateral del dedo gordo, un problema antiestético y doloroso que afecta considerablemente a la hora de caminar y encontrar un calzado adecuado. Estas protuberancias surgen en la base de la articulación del dedo gordo del pie.
La aparición de los juanetes puede ser debida a distintos motivos, aunque la principal causa es la genética, mientras que en otros casos puede ser debido al uso de un calzado incómodo, zapatos con mucho tacón y punta muy afilada o bien zapatos que estén mal hechos. No importa cuál sea la causa que ocasione los juanetes, ya que una vez empiecen a surgir, este problema irá empeorando de forma progresiva hasta que el hueso quede con forma de espolón calcificado, también conocido como juanete.
Evidentemente la mejor manera de evitar este problema es a través de la prevención, una prevención que básicamente se centra en evitar el uso de zapatos con mucho tacón y estrechos en la punta. A pesar de lo que muchos puedan pensar, los juanetes tienen solución. En los casos de mayor gravedad, es imprescindible someterse a cirugía para poder eliminar la articulación que esta deforme, una cirugía convencional que realizaba la incisión para corregir el espolón. Es uno de los defectos que más sufren las mujeres en los pies, un problema incómodo, doloroso y que causa inflamación.
Recientemente ha salido a la luz una nueva técnica, una alternativa a la cirugía tradicional que consigue a través de una pequeña incisión de apenas tres milímetros eliminar lo que sobra del hueso. Es un tipo de intervención que permite al paciente entrar y salir caminando perfectamente sin problemas. A pesar de lo que muchos pacientes piensan no se emplea el láser, ya que no es posible deshacerse de los juanetes mediante el láser. Entre las 72 horas y 45 días después de la intervención se realizarán controles regulares así como sesiones de fisioterapia.